Pearl Jam en Praga: Crítica del Concierto

20.7.2018 by Miller Harrison

El 1 de julio fue una celebración de la música Rock en Praga. Pearl Jam ofrecieron su primer show en la capital bohemia después de nada menos que seis años desde la última vez que vinieron a Praga. Un show honesto, energético y bien presentado.

Esta legendaria banda nació en 1990 en Seattle como parte del movimiento "Grunge" (otras bandas conocidas de Grunge son Nirvana y Soundgarden, por ejemplo). Ha mantenido prácticamente los mismos miembros desde su creación: Eddie Vedder, Mike McReady, Stone Gossard, Jeff Ament, Matt Cameron (desde 1998). Actualmente Boom Gaspar, los acompañan al órgano desde 2002.

Aunque recientemente tuvieron que posponer un concierto en Londres debido a la salud vocal de Eddie Vedder's, durante este concierto en Praga el frontman no mostro ningún signo de mala salud. Su voz, más fuerte que nunca, resonaba por todo el O2 Arena con un coro de 18.000 fans acompañándolo durante la mayor parte del concierto.

La escenografía podría considerarse "minimalista": no había efectos especiales ni videos, solo juegos de luces que reflejaban la intención de cada canción. Todo el show daba una sensación de espontaneidad y, mientras que el cantante era la pieza central del concierto, cada miembro de la banda aportaba su toque personal. Los solos de Mike McReady no podían ser más adecuados y demostraban una técnica superior, al igual que la precisión del batería Ament-Cameron. El sutil toque de órgano Hammond de Gaspard daba un toque de ternura a las baladas y agresividad en las canciones más cañeras, junto con el guitarra rítmico Stone Gossard.

Durante el concierto Vedder tuvo el detalle de introducir a la banda en checo, así como de rememorar al icono nacional Václav Havel (el presidente de la República Checa durante el fin del comunismo y la posterior transición). Vedder le dedicó la canción Dissident ("disidente") mientras criticaba a Donald Trump.

¿Y lo mejor del concierto?

Los bises, enormes. Todas las luces estaban encendidas a máxima potencia así que se podían ver las caras de todo el público mientras cantaban "Alive", y luego "Rockin' in the Free World" (de Neil Young) mientras el batería lanzaba panderetas al público (¡de verdad!). Un final memorable.

El concierto de Pearl Jam en Praga fue una celebración de la normalidad y simpleza pero también del virtuosismo y el talento. Es difícil pensar en otras bandas que ofrezcan un show tan honesta y potente con un set list de dos horas y media.

Si descubres que Pearl Jam tocan cerca de tu ciudad, no dudes en verlos. Puedes ver las fechas de su tour en www.pearljam.com.